Primero que nada, gracias, no una sino muchas porque me dejaron conocer de sus anécdotas, alegrías, historias, en este momento siento una mezcla de alegría pero a la vez de nostalgia, cuando se llegaba el momento de terminar nuestro proceso institucional, me les lleve un toque de creatividad, complicidad, responsabilidad y amistad, es lo que me llevo de estos años estando con ustedes.

 

Solo quiero decirles gracias nuevamente, por permitirme tener una de las mejores experiencias de mi infancia y adolescencia, quiero que sepan que los llevo en mi corazón y que los recordaré como mis amigos y compañeros que me permitieron disfrutar cada una de mis clases, solo me resta decirles que a partir de este momento comienzan otra etapa de sus vidas, muy significativa, pero de lo que si estoy segura es que esta última marcara cada una de sus vidas.

 

Un abrazo inmenso para todos

 

Con cariño: Juan David Arias Arcila